
Los primeros momentos de la detención —a menudo los más tensos y en los que las personas corren mayor riesgo de sufrir tortura y malos tratos— deben recibir una atención creciente. Reconociendo esta vulnerabilidad crítica, el Comité para la Prevención de la Tortura (CPT) de Chile, en colaboración con Carabineros de Chile y con el apoyo de la Asociación para la Prevención de la Tortura (APT), desarrolló la Guía de Monitoreo para la Prevención de la Tortura en Recintos Policiales. Esta iniciativa constituye el primer enfoque sistemático en América Latina para transformar el monitoreo preventivo en salvaguardias concretas para las personas detenidas, reforzando la protección de los derechos humanos y garantizando el acceso a la justicia desde la custodia policial.
La Guía está dirigida principalmente para quienes participan en el monitoreo de la detención policial—como los mecanismos de prevención, las Instituciones Nacionales de Derechos Humanos y las unidades de derechos humanos dentro de las fuerzas policiales—el documento ofrece un marco práctico para garantizar que, en las primeras horas críticas tras un arresto, las medidas de seguridad se apliquen con pleno respeto a la dignidad y los derechos de las personas privadas de libertad.
¿Por qué esta guía es imprescindible en el ámbito de la prevención de la tortura?
Primero, la Guía incorpora las perspectivas policiales, iluminando el complejo mandato de los Mecanismos Nacionales de Prevención (MNP), el cual va más allá de la reactividad hacia el diálogo constructivo y el compromiso proactivo. Destaca, en su propia voz, cómo las personas agentes de la policía entienden el rol del MNP y cómo comenzaron a implementar sus recomendaciones.
Segundo, establece una metodología colaborativa basada en el diálogo que fomenta un compromiso constructivo entre quienes realizan el monitoreo y las personas oficiales de la policía, lo que es esencial para implementar cambios significativos.
La Guía fue presentada el 29 de julio de 2025, en Santiago de Chile, en un evento que reunió a autoridades de alto nivel, incluyendo a Luis Cordero Vega, Ministro de Seguridad Pública, y Daniela Quintanilla, Secretaria de Derechos Humanos, quienes destacaron la importancia de mantener y ampliar los esfuerzos robustos de monitoreo en la custodia policial.
El documento es el resultado de cuatro años de trabajo colaborativo entre el equipo de función policial del CPT y Carabineros de Chile. Refleja aprendizajes acumulados y transformaciones institucionales impulsadas por un diálogo técnico y constructivo continuo.
“El trabajo de la APT históricamente se ha centrado en desarrollar metodologías. Lo que faltaba era precisamente una perspectiva basada en las realidades latinoamericanas. Este momento representa un hito de enorme valor institucional. Es la primera vez que se sistematiza una línea completa de trabajo, desde la metodología de visitas hasta los resultados y prácticas observadas desde la realidad latinoamericana”, destacó Sara Vera, representante regional de la APT, durante el lanzamiento.
Al detallar prácticas replicables, la Guía ofrece un modelo para que otros países de la región mejoren el monitoreo policial, fortalezcan la confianza entre las personas monitoras, legisladoras y las fuerzas del orden, para que se garantice el cumplimiento de las normas internacionales de derechos humanos.
Esta publicación fue posible sólo por la dedicación y el conocimiento experto de las personas autoras, el equipo de monitoreo policial del CPT, y Carabineros de Chile. Su compromiso conjunto con la rigurosidad del monitoreo preventivo y el diálogo institucional fue fundamental para el nacimiento de esta iniciativa, especialmente en contextos tan desafiantes para América Latina.